El mundo de mis ojos
Se alimentaba a base de setas y musgo.Vagaba por el bosque buscando nuevos rincones, nuevos olores. Disfrutaba en la penumbra del atardecer, cuando las sombras comenzaban a desaparecer.
Cada día sus ojos se adaptaban más a los cambios de luz. Cada paso que daba debía darlo con extrema precaución, pues salvajes animales merodeaban los frondosos bosques donde habitaba.
Le encantaban los sabores nuevos, pero dudaba a la hora de probar nuevas plantas, por no saber cómo reaccionaría su cuerpo tras la ingestión. Recordaba haber sufrido alucinaciones después de probar una flor blanca, que a simple vista parecía totalmente jugosa, comestible.
Recordaría bien el resto de sus días la mágica experiencia. Sus sentidos se agudizaron. Sintió la simbiosis con el mundo que alrededor de él se extendía. La quietud de su mente era extrema, su oído le daba más información de la que jamás había procesado, experimentando una sensación de placer intensa.
La concentración que llegó a alcanzar le produjo un extraño estado. Todo alrededor comenzó a cobrar vida. Los árboles, ramas y flores, comenzaron a desdibujarse, convirtiéndose en emanaciones de energía, de un color no definido, opaco, de una belleza sin comparación alguna.
Miles de filamentos envolvían cada pedacito de bosque donde enfocaba su atención, y llegó a dudar de la veracidad de su visión. Aunque también dudó de su visión ordinaria, pues siempre había visto a los árboles como magníficos gigantes de fuerte corteza, y a las flores como delicados seres que desprendian un olor maravilloso, pero nunca paró a pensar que todo a su alrededor podía ser parte de un mismo ser. Un ser inmenso, enorme, que irradiaba magia en forma de emanaciones, que nosotros separábamos y clasificábamos, dándoles nombres y separándolos en clases, cuando en realidad todo lo que vemos es la gran ilusión que se construye para nosotros, para el deleite de nuestros ojos, para nuestra lección diaria, para la gran aventura que experimentaremos 'hoy'.
No hay un mañana, no hay un después, sólo existe donde estás, porque lo generas con cada una de tus decisiones. Viniste a aprender, viniste a crecer, para luego ascender. Bienvenido a tu gran simulación, todo esto es para ti.
duhnn